¡Buenos días! En este nuevo día vamos a hablaros un poco del acné, que a tantos jóvenes y adolescentes afecta y de algunos remedios que podéis utilizar en vuestra casa para tratar de pararlo.
El acné es una enfermedad de la piel caracterizada por la inflamación de las glándulas sebáceas y, así, la aparición de espinillas y granos en la cara, cuello, pecho, hombros y espalda, principalmente. Suele empezar durante la pubertad, al mismo tiempo más o menos que los cambios hormonales, y puede durar hasta la edad adulta tardía. Puede ser emocionalmente angustioso e inoportunamente persistente.
No se trata de una amenaza grave para la salud pero sí puede dejar bastantes cicatrices. Ésta enfermedad es más común en los países industrializados.
El tratamiento para el acné se utiliza para prevenir la formación de lesiones nuevas y tratar de curar las existentes.
Podemos tratarlo en casa utilizando algunos productos fáciles de conseguir, entre ellos y del que hablaremos en esta entrada, la PAPAYA.
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La papaya es el fruto del papayo, es comestible, con una pulpa semejante a la del melón. Tiene forma alargada y es de color naranja con muchas semillas en su interior. Se consume normalmente de forma cruda, sin su cáscara y semillas.
La papaya es muy utilizada en una gran cantidad de productos de belleza. Se trata de un remedio para el acné totalmente natural, que consigue eliminar células muertas y el exceso de lípidos de la superficie de la piel, lo que la dejará suave y tersa. Esto se debe a que es un gran bactericida, que consigue frenar el avance del microorganismo presente en la formación del acné. Contiene papaína, que es una enzima que ayuda a reducir la inflamación y a prevenir la reducción de pus.
Este remedio es ideal para todos los tipos de piel pero sobre todo para la piel grasa.
Se trata de un remedio sencillo para el que realizaremos una mascarilla.
Para realizar esta mascarilla necesitaremos dos rebanadas de papaya, una cucharada de avena y, en caso de ser necesario, un poco de agua.
Para elaborarla comenzamos por cortar dos trozos algo grandes de la papaya y los colocamos en el vaso de nuestra batidora con una cucharada de avena y algo de agua si la necesitamos. Batimos nuestra mezcla.
Enjuagamos primero nuestra cara con agua y secamos. Esparcimos nuestra mascarilla sobre las zonas afectadas y dejamos que seque durante unos 15 minutos. Pasado el tiempo retiraremos la mascarilla ayudándonos de algo de agua tibia.
Repetimos este procedimiento varias veces por semana.
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