causadas por la electricidad, el calor, la luz, la radiación y la fricción. Se clasifican en tres grados:
http://www.naturisima.org/10-remedios-caseros-para-quemaduras-menores/- Las de primer grado solo afecta a la capa superior de la piel (roja, dolorosa y seca al tacto)
- Las de segundo grado se extiende más en las capas que están por debajo de la piel (puede verse "mojada" o decolorada, con ampollas blancas y son dolorosas)
- Las de tercer grado se extienden por toda la piel y a veces alrededor del tejido (secas o correosas, piel de color negro, blanco, marrón, amarillo, muy graves y causan hinchazón), estas últimas generalmente duelen menos porque se han dañado las terminaciones nerviosas.
Consejo: puedes tomar Ibuprofeno para calmar la inflamación en los tejidos y ayudar a calmar el dolor.
A continuación, trataremos cuatro remedios caseros que podrás utilizar para curarlas: el aloe vera, la miel, la menta y el vinagre.
En esta entrada enunciaremos el poder curativo de las plantas de aloe vera. Éstas son muy fáciles de conservar, crecen en casi todos los ambientes interiores y exteriores cálidos. Se utilizan para el tratamiento de pequeñas quemaduras de primer grado y ciertas de segundo, además se han usado desde la antigüedad para tratar problemas de piel y reducir la inflamación.
Si te quemas, sigue estos pasos para evaluar la gravedad de la quemadura y tratarla:
Si te quemas, sigue estos pasos para evaluar la gravedad de la quemadura y tratarla:
1. Aléjate de lo que te causó la quemadura.
2.Debes determinar la gravedad de la quemadura.
¡Atención! Nunca trates una quemadura de tercer grado o cualquier herida abierta con aloe vera, puesto que no permite que se seque y hace que sea imposible sanarse. Si sabes que es de primer grado o una pequeña de segundo, continúa con estos pasos:
3. Refresca tu herida con agua fría de 10 a 15 minutos, esto ayuda a sacar el calor de la herida y a calmarla antes de colocarle aloe vera.
4. Limpia tu herida suavemente con un poco de jabón, luego enjuágala para retirar la espuma y sécate con palmaditas con una toalla.
¡Cuidado! No frotes la herida porque puedes irritar todavía más la piel.
5. Si tienes una planta de aloe vera en casa o cerca de donde te quemaste, puedes usarla para conseguir un aloe vera fresco. Saca algunas hojas consistentes cerca de la parte final de la planta y córtalas en mitades para sacar lo que tiene en su interior con un cuchillo. Corta cualquier espina de la planta para no pincharte y coloca el aloe vera en un plato.
También puedes utilizar el aloe vera que se vende en las tiendas sin receta médica, o tomar un baño de éste hirviendo sus hojas en agua o utilizando un gel.
6. Coloca una cantidad abundante de aloe vera en tu herida. Frótalo en el área quemada, asegurándote de no restregar el área afectada ni de frotarla demasiado. Repite este proceso 2 o 3 veces al día hasta que ya no te duela.
Si la herida está en un lugar que podría frotarse o lastimarse, cúbrela con una venda o gasa.
Acude a un doctor si el aloe vera no es suficiente para curar tu quemadura y ésta empeora, se hincha, sale pus, se irrita u otras complicaciones.